El Castillo de Laguna de Negrillos, que también se conoce como Castillo-Alcazar de los Quiñones, se encuentra en la población de Laguna de Negrillos, en la comarca del Páramo de la provincia de León, es decir, en la zona sureste de la provincia. Está situado en el ángulo suroeste del pueblo, frente a un arroyo.
Castillo de Laguna de Negrillos, en León. Castilla y León. España. |
Esta localidad aparece documentada en una donación efectuada por Alfonso III a la Iglesia de San Salvador en Oviedo, en el año 905, en la que se incluyen entre otros bienes “Lacuna” hasta el río Esla.
En el año 1077 se documenta otra donación efectuada por Pedro Martínez y su esposa Jimena, quienes donan a la Iglesia de Astorga un Monasterio fundado por ellos en la localidad de Negrillos. En el año 1085, Alfonso VI confirma las donaciones anteriores a favor de la Iglesia de Astorga.
Tras la firma del Tratado de Sahagún, en el año 1158, entre Fernando II de León y Sancho III de Castilla, el reino leonés solo tiene posibilidades de expandirse hacia el sur, por la romana Vía de la Plata, convirtiéndose Laguna de Negrillos en un enclave defensivo de primer orden. Los reyes de León tratan de crear defensas en las fronteras, teniendo para ello el río Esla una importancia estratégica.
En la segunda mitad del siglo XII la localidad de Laguna de Negrillos cobra importancia debido a la separación de los reinos de León y Castilla. Fernando II entrega la Villa a Suero Rodríguez en pago por sus servicios. Este la convierte en capital de su Señorío.
La definitiva repoblación de las tierras de Laguna se efectuó por Alfonso IX quién fortaleció la Vía de la Plata. Alfonso IX, en 1188, recién nombrado Rey de León, ratificó las propiedades que la Iglesia de Astorga había recibido de sus antepasados. En esta etapa se inicia la construcción de las murallas y el castillo.
Castillo de Laguna de Negrillos, en León. Castilla y León. España. |
A principios del siglo XIII, en 1205, tiene lugar el otorgamiento de un Fuero a la localidad, tal vez por la conclusión de la repoblación de la Villa. El Fuero es otorgado a Laguna y sus trece aldeas (algunas desaparecidas actualmente).
Tras la unión de los reinos de León y de Castilla (1230), Laguna pierde importancia estratégica. En el siglo XIV, Pedro Suárez de Quiñones compró la villa, pasando esta después a su heredero, Diego Fernández de Quiñones. Cuando se le concede a Diego Fernández de Quiñónes, el título de delegado del Rey, acomete la reconstrucción del castillo actual (la fabrica actual es del siglo XV), convirtiendo a Laguna en el centro de las posesiones de los Condes de Luna en El Páramo y en su residencia habitual.
Este Diego Fernández, Merino Mayor de Asturias, se casa con María de Toledo. El más conocido de sus diez hijos era el segundo: Suero de Quiñones. El alcázar de Laguna de Negrillos es donde se retiró a descansar Suero de Quiñones, terminado el Passo Honroso y desde donde emprendió la peregrinación a Santiago en acción de gracias.
María de Toledo, muerto su marido y presos sus hijos, Pedro y Suero, se alza contra el poder real, haciendo precisa la venida en persona de Juan II para someterse en 1448.
La torre del homenaje es de base cuadrangular, y destaca por su rectitud, Posee cinco plantas y almenas en la parte superior, puertas de arco agudo y ventanas de arco redondo. Se aprecia en su base fortificación de cal y canto. La familia de Suero de Quiñones dotó al Castillo de adarves, saeteras, torres de flanqueo, letrinas y varios cubos.
Tanto el castillo como la muralla urbana de Laguna de Negrillos se encuentran en estado de ruina progresiva. Ambos se encuentran bajo la protección de la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949, y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español.