El Monasterio de Santa María de Carracedo está situado en la localidad Carracedo del Monasterio, en el municipio de Carracedelo, comarca de El Bierzo. Está ubicado muy cerca del tramo del Camino de Santiago que va desde Ponferrada hasta Villafranca del Bierzo.
Se trata de una antigua abadía fundada en el siglo X que a lo largo de su existencia ha pertenecido primero a la orden benedictina y después a la orden cisterciense.
A lo largo de su historia ha sido objeto de varias reformas arquitectónicas por lo que presenta distintos estilos: tiene elementos románicos, cistercienses y protogóticos, de los siglos XII y XIII.
Aunque actualmente está en estado de semiruina, pero se puede visitar.
Monasterio de Santa María de Carracedo, en León. Castilla y León. |
El conjunto se compone de las dependencias monásticas y el Palacio Real. Actualmente es sede del Museo Museo del Císter y del Monacato berciano, dependiente del Instituto Leonés de Cultura.
El rey Bermudo II en el siglo X donó estos terrenos a los monjes benedictinos para construir un Monasterio dedicado a San Salvador. En 997 el Monasterio fue destruido por Almanzor, igual que muchos otros de la zona. Por lo que, cuando Bermudo II murió, no pudieron enterrarlo allí.
Ya en el siglo XII, en concreto en 1138 Sancha Raimúndez, hermana de Alfonso VII el Emperador, mandó restaurar el Monasterio de San Salvador, y vivió en él durante largas temporadas, convirtiéndolo en Palacio Real.
Al haber sido objeto de privilegios por parte de la Corona, el Monasterio logró tener autoridad sobre varios monasterios benedictinos en tierras de León, Galicia, Asturias y Zamora, y con control económico sobre decenas de granjas, viñedos, molinos, etc.
En 1203 dejó de pertenecer a la orden de los benedictinos para pasar a ser de la Orden del Císter y, cambió de advocación, pasando a llamarse Monasterio de Santa María de Carracedo.
En el siglo XIV Carracedo entró en una crisis, finalizada en 1505 con su adhesión a la Congregación Cisterciense de Castilla. A principios del siglo XIX sus obras de ampliación que quedaron detenidas por la Guerra de la Independencia en 1808. Fue desamortizado en 1835, entró en un abandono que duró hasta 1988, cuando la Diputación Provincial de León, propietaria con el obispado astorgano del monasterio, comenzó a restaurar las partes del edificio que seguían en pie, restauración que duró hasta 1991.
En 1929 fue declarado monumento histórico-artístico nacional y actualmente está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC).